Don Isaac una tradición en Orizaba con su venta de fruta, tiene 76 años

Durante 3 meses autoridades municipales no le permitieron vender, por la pandemia. Necesita vender para sostener a su esposa y dos nietos

Orizaba, Ver.- Con 78 años a cuestas, cansado pero con la responsabilidad de sacar adelante a dos nietos de 9 y 8 años, don Isaac Guzmán vende de lunes a viernes bolsitas de fruta en la esquina de conocida escuela particular desde hace 46 años.

En todo ese tiempo, aun con lluvia, viento, calor o frío, han sido contadas las veces que don Isaac ha faltado, pues tiene que vender para sostener a su esposa y desde hace siete años a sus nietos. Sus clientes frecuentes son los estudiantes que al salir de la escuela o de camino a la misma, le compran bolsitas de fruta o cacahuates.

Don Isa, como le dicen muchos de cariño, camina durante una hora desde su casa, en Sur 11, muy cerca de Jalapilla hasta la Oriente 4 y Sur 31 jalando su carrito de madera donde acondicionó una vitrina donde coloca las bolsitas con fruta, protegiéndolas de la contaminación.

No pudo vender durante tres meses

A raíz de la pandemia su venta cayó. Por el cierre de las escuelas dejó de haber clientes, además de que el Ayuntamiento no le permitió vender durante los primeros tres meses de la pandemia, por ser, además, adulto mayor.

Durante ese tiempo su situación económica se complicó y sólo sobrevivía él y su familia con lo que ganaba su esposa con la venta de antojitos. “Ya no aguanté, el ayuntamiento no quería que saliera a trabajar, salgo con el peligro, pero qué le hago”.

Lo que lo motiva a seguir buscando el pan de cada día son sus nietos, que les dejó su nuera desde hace 8 años, cuando los pequeñitos tenían dos y un año de edad.

Aunque son muchos los hoy adultos que crecieron comprando fruta a don Isaac, la emergencia sanitaria provocó que éstos también dejaran de llegar a comprar y había días que no tenía venta.

Antes preparaba 40 bolsitas de fruta, a raíz de la pandemia 15

Diariamente, cuenta, prepara alrededor de 40 bolsitas de fruta picada: sandía, pepino, jícama, piña, naranja, coco, durazno, papa extranjera y otra fruta de la temporada, además de cacahuates enchilados; por la pandemia preparaba sólo 15 bolsitas, que no vendía en su totalidad.

Muchos años mantuvo el costo de la bolsita de fruta en 10 pesos, pero últimamente lo tuvo que ajustar a 15 pesos para sacar un poquito de ganancia, ya que el precio de la fruta también aumentó.

«Con chile para hombre»

“Con chile para hombre o para medio hombre”, es la frase con la que recibe a sus clientes, y es que el picante que utiliza pica más de lo normal, pero le da un excelente sabor la fruta.

Siempre con una sonrisa y una plática amena, don Isaac Guzmán, quien dejó por un rato a un lado su sombrero para utilizar una gorra con careta, se ha ganado el cariño y respeto de sus clientes, que poco a poco vuelven a comprarle.

Unos, los que tienen la posibilidad de hacerlo, le dejan un donativo económico, otros, en especie, su intención es ayudarlo a pasar este tiempo de pandemia, con dignidad.

Reconoce que hay días en que el cansancio por su edad lo vence, pero pensar en sus nietos, lo levanta. Afortunadamente no padece ninguna enfermedad y dice que seguirá llegando a vender a ese lugar, hasta que Dios se lo permita.

En El Sol de Orizaba