En la zona conurbada Veracruz-Boca del Río, el evento de norte ha dejado hasta la tarde-noche dos personas lesionadas y daños materiales cuantiosos.
De acuerdo al director de protección civil de Veracruz, Alfonso García Cardona, se ha registrado la caída de 25 árboles, 4 postes de telefonía, 11 postes alumbrado, 7 cables desprendidos.
Asimismo la rachas de viento ha dejado 4 autos dañados por árboles, 3 incendios de pastizales y 2 lesionados.
Recordar que este último incidente se suscitó cuando un árbol cayó sobre el vehículo de las personas en el fraccionamiento Los Volcanes.
Por fortuna las lesiones no ponen en riesgo la vida de las personas, pero los daños materiales son cuantiosos para el propietario del vehículo.
Otro hecho fue el registrado en el fraccionamiento Reforma de la ciudad de Veracruz, donde un ficus y una palmera, cayeron sobre dos vehículos, una camioneta Chevrolet Tracker y un automóvil Chevy Monza, además de causar daños a la fachada de un restaurante.
Los hechos se registraron en la avenida Cristóbal Colón esquina Grijalva y no dejó personas lesionadas de gravedad.
De igual manera, un ventanal del salón social Club de Leones, ubicado en la avenida Simón Bolívar fue derribado por los efectos del Frente Frío número 16.
También un camión de pasajeros que se encontraba en servicio en el municipio de Boca del Río, quedó destechado.
Se trató de la ruta Boca del Río-Antón Lizardo con número económico 386 que avanzaba por el bulevar Ruiz Cortines casi esquina Américas sobre la parte superior del distribuidor vial conocido como de los Voladores de Papantla cuando una intensa racha hizo mover toda la unidad.
Según el conductor, se sintió un remolino de fuerte aire y el techo se desprendió volando unos cuantos metros ante el asombro de los pasajeros.
Aunque la unidad se encontraba en servicio, ninguno de los pasajeros resultó lesionado pero tuvieron que bajar del autobús para continuar su trayecto por otros medios.
García Cardona mencionó también que, en diferentes partes de la ciudad, vecinos pidieron el apoyo para el retiro de láminas por representar un riesgo ante las fuertes rachas de viento que superaron los 100 kilómetros por hora.
Sin embargo, reconoció que, en muchas ocasiones se les exhorto a los propietarios de algunas viviendas asegurar sus láminas, lamentablemente hicieron caso omiso y con las fuertes ráfagas de viento que prevalecen cualquier persona, incluso elementos a su cargo estarían en peligro, en caso de realizar alguna maniobra para quitarlas.