En los últimos dos años, el mar ha avanzado costa adentro y se ha «comido» al menos 15 viviendas en la localidad de Las Barrancas, municipio de Alvarado, Veracruz.
Nancy Lizeth Ochoa Tello, habitante de la región, urgió a las autoridades federales poner especial atención a lo que está ocurriendo y buscar una solución a la brevedad posible.
Hasta el momento solo ha sido una línea de costa en donde se han presentado afectaciones a terrenos y casas socavadas, pero temen que a mediano plazo los estragos sean mayores.
Algunas de las familias se han tenido que apoyar de parientes en comunidades cercanas y otros permanecen en la zona porque no quieren perder su patrimonio.
«Ya no tenemos playas, prácticamente el mar se encuentra en las puertas de nuestras casas y es muy apremiante tener que vivir con la zozobra de dormir y que al día siguiente ya veas el mar dentro de tus casas».
Urgió al gobierno informar si tiene un proyecto para rescatar esa área en donde los habitantes se dedican principalmente a la actividad pesquera de donde dependen al cien por ciento.
Participó en la conferencia de prensa en donde se anunció que Greenpeace realizará una investigación de la situación de los arrecifes, principalmente de los que no están considerados en el Parque Nacional Sistema Arrecifal Veracruzano.