Diputada local presentó una iniciativa que abroga la Ley Relativa a la Prostitución y Profilaxis Social

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La diputada local, Itzel Yescas Valdivia presentó una iniciativa con el objetivo de dignificar el trabajo sexual y establecer que las autoridades municipales definan y autoricen las zonas de tolerancia en las que se realice esta actividad.

Al subir al pleno, la legisladora presentó la iniciativa con proyecto de decreto que reforma y adiciona diversas disposiciones de la Ley de Salud de Veracruz y que abroga la Ley Relativa a la Prostitución y Profilaxis Social.

La representante del PAN indicó que a esta actividad se le debe dejar de llamar prostitución y en su lugar se establecería que en materia de salubridad local, corresponde al Gobierno el control sanitario del trabajo sexual y las zonas de tolerancia.

También, se crearía el capítulo X Bis, “Del trabajo sexual y las zonas de tolerancia”, definiendo al trabajo sexual como la actividad en la que una persona intercambia servicios sexuales a cambio de dinero o cualquier otro bien.

En la propuesta se establece que toda persona que ejerza el trabajo sexual debe sujetarse a las medidas y formas de control que la Dirección de Salubridad Local establezca, así como a la autoridad municipal correspondiente.

Además, se deben conocer y utilizar las medidas preventivas para evitar el contagio o transmitir enfermedades, por contacto sexual.

Por otra parte, se prohíbe el ejercicio del trabajo sexual a personas menores de edad y determina que corresponde a las autoridades municipales definir y autorizar las zonas de tolerancia en las que se realice esta actividad.

El trabajo sexual no podrá ejercerse cerca de áreas habitacionales, escuelas, oficinas públicas, centros culturales, religiosos y deportivos, y queda prohibido el acceso de menores de edad al interior de establecimientos comerciales de esta índole.

La legisladora puntualizó que es deber del Estado reconocer aquellos derechos que tiene los seres humanos por el simple hecho de serlo, “sin embargo, derechos como la igualdad, la seguridad, el libre desarrollo de la personalidad, la no discriminación por preferencias sexuales, derechos sexuales y de reproducción, la no discriminación de género, el trato digno, entre otros, no son respetados en la práctica ni reconocidos en su totalidad”.

Aseveró que en la actualidad el trabajo sexual se caracteriza por ejercerse dentro de un contexto complejo de discriminación social y laboral, que se determina por los prejuicios, la estigmatización, el rechazo, la pobreza y la falta de oportunidades en el mercado de empleo formal.

Asimismo, manifestó que es necesario que se regulen las zonas de tolerancia, donde las y los trabajadores sexuales puedan ejercer su trabajo de una forma digna, teniendo acceso a la seguridad pública, a centros de salud, a farmacias y a métodos de protección contra enfermedades de transmisión sexual, entre otros.