Pesé a que sus gritos, llantos y reclamos no fueron escuchados por el presidente Andrés Manuel López Obrador, pobladores pedían justicia y apoyos en materia de búsqueda de desaparecidos
Córdoba, Ver.- Justicia, apoyos en materia de búsqueda e investigaciones fueron algunos de los temas que ciudadanos de la región de las Altas Montañas pidieron al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.
Pesé a que sus gritos, llantos y reclamos no fueron atendidos por la primer autoridad del país, diversas personas sin importar la lluvia llegaron a las afueras de la exhacienda Toxpan, como es el caso de una colectiva de Ixtaczoquitlán donde piden que un próximo regidor no llegue a su puesto por presuntos actos violentos hacia las mujeres.
A decir de las declarantes, Roberto «N» agredió a María Esther, su hermana de 58 años, quien vive en la congregación de Cuautlapan perteneciente a Ixtaczoquitlán presuntamente por reclamos de una herencia, «hace más de un año tienen una demanda en la Fiscalía que no ha tenido avance, pedimos a la fiscal que esto avance».
Lo anterior ocurrió en 2020 pero ahora buscan que este próximo regidor no llegue a su cargo pues podría obtener ciertos beneficios que entorpezcan el proceso de denuncia.
Las activistas comentaron que Roberto «N» ha intentando acercarse a su hermana para dialogar, sin embargo, esta no quiere tenerlo cerca ya que no es la primera vez que busca hacer esta acción.
Del otro lado de la calle, estaba la señora Bernarda Cruz Contreras, madre de José, un joven de 24 años originario de Potrero Nuevo, quien desde hace un año se encuentra detenido por ultrajes a la autoridad.
Fue su tía Rebeca Cruz García quién relató que el 17 de marzo del presente año, alrededor de las 03:00 de la mañana, oficiales entraron a su domicilio buscando armas: «entraron con violencia a buscar armas, nosotros les dijimos que ¿cuáles?, somos gente de campo, no tenemos eso, revolotearon la casa y tiraron las salsas para la venta de tamales de mi hermana, hasta la golpearon».
El joven, al ver estas acciones abrió la puerta de su casa con tal de que no lastimaran a los miembros de su familia y ahora está detenido por supuestos ultrajes a la autoridad, pero, a decir de sus consanguíneos éstos elementos se llevaron a José, el cual permanece detenido, «mi hijo es trabajador y deportista, tiene una niña y la mujer ve de donde sacar, nosotros por más que queremos apoyarla no podemos, en la familia somos puras mujeres, quiero saber ¿que clase de autoridad tenemos? «.
De igual forma, al despejarse un poco la entrada a la exhacienda de San Francisco Toxpan, una mujer originaria de Tierra Blanca, entre lágrimas pidió ayuda al presidente de la República para encontrar a su hijo Alfonso de 24 años, quien este 26 de septiembre cumple un año de desaparecido, sin tenerse una pista de su paradero.
Mi expediente esta en Xalapa y no avanza, apiádense de una madre, de mi hijo, llévenme a mi pero regrésenme a mi hijo
Comentó que lo último que supo a voz de sus vecinos es que Alfonso fue llevado por una camioneta gris, ella levantó la denuncia sobre este acto y a la vez el fiscal del lugar ordenó una investigación para ella, situación que le generó extorsión vía telefónica e incluso pagos económicos.
«No me importa el dinero, solo quiero a mi hijo, aun debo ese dinero, yo no voy a denunciar solo quiero que me lo entreguen, mi corazón de madre me dice que está vivo».
Finalmente, Joaquín Contreras buscó hablar con Andrés Manuel López Obrador pues quiere apoyo para él y otros 50 compañeros que se vieron afectados al ser «desempleados» del Ingenio El Potrero, con beneficios como casas, jubilación, servicios médicos y seguros que resultaron ser fraudulentos y ahora quieren retomar este tema.
«Vinieron atrocidades y hasta en la cárcel estuvimos, pasamos por junta de conciliación demandando volver a nuestro empleo y aunque ganamos ya habíamos perdido pues no obtuvimos nada ya que supuestamente cometimos actos ilícitos pero supimos que eran trámites de gobiernos pasados que nos querían perjudicar».
Dijo que en el tema de las casas ofrecieron 100 mil pesos y eso se fue abaratando; muchas personas fallecieron en el pie de lucha sin obtener sus derechos laborales como tener la plaza, que se pague la prima de antigüedad.
Cada manifestante, traía una petición la cual fue firmada de recibido por los servidores de la nación y con la esperanza de poder tener una reunión o charla con él se quedaron en espera.
En Diario de Xalapa