El gobernador llega a su primer año de mandato con altos índices de violencia, subejercicio del gasto y poca obra pública. En lo político, ha ganado rounds al grupo de su antecesor Miguel Ángel Yunes.

XALAPA, Veracruz.— El primer año de gobierno de Cuitláhuac García en Veracruz quedó marcado por problemas de inseguridad y violencia —ejemplificados en hechos como las matanzas de Minatitlán y Coatzacoalcos—, por un subejercicio presupuestal que impactó en áreas como la infraestructura y la salud —de acuerdo con expertos— y por las acciones que emprendió contra el grupo político de su antecesor, Miguel Ángel Yunes, para ubicar en cargos públicos a personas cercanas a su círculo.                

En cuanto al ejercicio del gasto, el Observatorio de Finanzas Públicas, que dirige el investigador Hilario Barcelata, indica que al corte del mes de octubre había un subejercicio superior a 75,000 millones de pesos, una situación que fuentes consultadas atribuyeron a la falta de preparación del equipo del mandatario morenista.

“En las comparecencias vimos que los titulares de la Sedesol (Secretaría de Desarrollo Social) y la SIOP (Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas), Guillermo Fernández y Elio Hernández, aceptaron tener un subejercicio por el 50% de sus recursos (…) Y el secretario de Desarrollo Social dijo que el subejercicio de su área tenía como razón la curva de aprendizaje”, señaló la diputada federal Mariana Dunyaska García, del PAN.

“El hecho de que los funcionarios no estén preparados para el encargo público que van a enfrentar también es corrupción, es aceptar algo para lo que uno no está listo”, reclamó la legisladora, quien advirtió de que esto tiene consecuencias en áreas como la atención a la pobreza y la generación de infraestructura necesaria para la entidad.

La Sedesol, según cifras de García, ejerció 399 millones de pesos de un total presupuestado de 589 millones, mientras que la SIOP gastó 1,094 millones de pesos de un total previsto de 2,165 millones.

Para el analista Aurelio Contreras, este subejercicio también ha tenido consecuencias en el área de salud, pues el dinero no ha llegado a donde se necesita para prevenir y atender enfermedades como el dengue.

“Vimos los efectos perniciosos de ese no gastar el dinero dizque para hacer ahorro. Lo vimos directamente en la crisis sanitaria por el dengue, porque el gobierno decidió ahorrarse lo del insecticida. Decidieron no fumigar cuando tenían que hacerlo, porque pensaron que era un gasto innecesario y las consecuencias fueron más de 8,000 casos de esta enfermedad, una situación pavorosa que además provocó muertes”, dijo, al tiempo que llamó a sancionar a los responsables de los subejercicios.

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